Peces: Consejos para comprar un acuario y su cuidado y mantenimiento en casa

 

Hay dos tipos de peces de acuario: de aguas frías y tropicales. Necesitará usted dos tanques si pretende tener de los dos. Comience con unos pocos peces y aumente el número a medida que gane confianza. La carpa dorada, el pez de agua fría más común, es lo mejor para el principiante. Llega a alcanzar 15 cm de longitud, su vida es larga y resulta fácil de criar.

Otras variedades populares de agua fría son: shubunkin, koi, oranda y el pez del arroz japonés. Estos peces se pueden conservar a la temperatura de una habitación, entre 10 y 23ºC.

Un acuario tropical incluye muchas especies de colores, como los lebistes, el neón iridiscente, los xifóforos, los platis y los peces luchadores siameses. Pero no ponga nunca dos machos siameses juntos pues lucharán hasta matarse.

Los peces tropicales necesitan un calentador para mantener el agua entre 22 y 26°C.

Elección del tanque de acuario

El tamaño depende por lo general del número de peces que va a contener, pero como regla general adquiera el más grande que pueda. Un buen tamaño es 60 cm x 30 cm x 40 cm, pero los más populares miden de 45 cm a 1 m de longitud. En cualquier caso, asegúrese de que tiene sitio en su casa para el tamaño elegido.

Colóquelo sobre una superficie horizontal firme o un estante fuerte y ponga una capa de chapas de poli estireno bajo su base. Cúbralo con vidrio o plástico transparente para impedir que le entre polvo o que escapen los peces al saltar. La cubierta reduce además la evaporación y contribuye a mantener el agua a temperatura uniforme.

La iluminación puede consistir en luz diurna o tubos fluorescentes con pantallas que encajen en la parte superior del tanque. Lo mejor es una ventana que dé al norte, pero evite el exceso de luz solar y reduzca la incidencia de luz si el agua se vuelve verdosa o hay un crecimiento excesivo de algas verdes.

Instale una bomba de aire con un filtro para mantener limpia el agua y un contenido alto de oxígeno. Algunos filtros van provistos de una bomba eléctrica y no necesitan suministro de aire.

Instalación del tanque

Lave el tanque con agua limpia y cubra el fondo con grava de acuario bien aclarada en un espesor de 4 a 7,5 cm, formando pendiente hacia adelante. Añada unas cuantas piedras, guijarros o maderos de playa bien lavados como decoración. Las plantas pueden ser de plástico o vivas, como Cabomba y Vallisneria. Ponga en marcha los dispositivos para asegurarse que funcionan adecuadamente.

Examine con cuidado la oferta de peces antes de adquirirlos. Escoja peces de movimientos vivos, bien alimentados y libres de defectos. No pueble en exceso el tanque: los peces de agua fría necesitan un mínimo de 4,5 litros por 2,5 cm de pez. Los tropicales necesitan 750 mm2 de área superficial para cada 2,5 cm de pez.

Cuando transporte peces en un saco de plástico, procure mantener constante la temperatura para evitar el peligro de shock. Deje flotando el pez dentro de su saco en el tanque durante diez minutos antes de soltarlo.

Alimentación de los peces

Dé a sus peces alimentos básicos de buena calidad dos veces al día, pero tenga cuidado de no sobrealimentarlos. No se les debe dar más de lo que puedan consumir en cinco minutos.

Complemente la dieta con alimentos deshidratados en frío, como gusanos Tubifex.

Como plato especial se les pueden dar camarones de salmuera vivos (Artemia). Si va a estar ausente uno o dos días, los peces no necesitan que se les alimente.

Salud de los peces

Compruebe la temperatura del tanque de peces tropicales todos los días y mantenga limpio el cristal. Las algas de las paredes se pueden quitar con un «imán de algas»: dos imanes enfrentados, uno dentro y el otro fuera, que se desplazan con la mano. Extraiga los sedimentos y la comida desaprovechada con un tubo sifónico. Ambos accesorios se encuentran en las tiendas especializadas.

Cambie una cuarta parte del agua cada dos o tres semanas.

Observe si hay señales de enfermedad: las dos más probables son los hongos, que parecen manchas de algodón en el cuerpo, y el ich, que se presenta como manchas blancas del tamaño de una cabeza de alfiler.

Su vendedor le aconsejará cómo tratarlas. Si los peces se aglomeran en la superficie, la causa más probable será falta de oxígeno o excesivo calor. Evite introducir parásitos y desinfecte para ello cualquier planta nueva y tenga en cuarentena dos o tres semanas a los peces nuevos en un tanque separado.

Trasvase los peces que parezcan estar enfermos a un tanque separado para observarlos. Un pez que arrastre las heces puede estar estreñido y hay que alimentarlo con una dieta de elevado contenido de fibra, pero consulte a su vendedor para que le aconseje.